Numeroso público y autoridades acompañaron el evento, que contó con la presencia de un cuerpo de baile de Colonia Barón, que fue la atracción principal de la noche.
Hablar de Kerb para los pueblos alemanes, además de señalar la celebración religiosa que conmemora a su patrono, es también una excusa para el reencuentro. Retomando una antigua costumbre, en la noche del sábado, dos instituciones convocaron a reunirse en torno a una mesa para celebrar esta antigua tradición. Fueron la Asociación Cultural Germano Argentina y la Asociación descendientes de Alemanes del Volga quienes aceptaron poner sobre sus hombros la organización.
En el salón del ‘Germano’ unas quinientas personas se dieron cita para compartir una noche agradable. Hubo gente de distintos lugares de la provincia e inclusive de la vecina provincia de La Pampa que se sintieron movidos a estar presentes. La celebración comenzó con la entrada de autoridades portando los estandartes, seguidos por un numeroso grupo ataviado con trajes típicos de la etnia, quienes tuvieron luego la responsabilidad de atender a los concurrentes, algo que hicieron con la premura y maestría que ya es una tradición en las colonias alemanas.
Fue Hugo Schwab, presidente de la Asociación Cultural Germano Argentina quien, a los postres, inició en el uso de la palabra. “Quiero hacer llegar un saludo emocionado a la gente y a las autoridades que nos acompañan, a las autoridades y en especial a Elida Gette de Colonia Barón”, manifestó al comienzo. Luego de expresar su satisfacción por el éxito del convite invitó, y dio paso, a Juan Hippener quien, como es ya un clásico, fue el encargado de organizar, junto a su gente, le cena que como es costumbre estuvo exquisita. “Me llena de orgullo Juan que estemos trabajando juntos…”, fueron las palabras que Hugo Schwab utilizó para darle el ‘pase’ a Juan.
Juan, que como todos conocen, goza de un gran prestigio y cariño de la gente de las colonias y de todos quienes han tenido la oportunidad de haber compartido con él alguna de las numerosas fiestas que supo organizar, se dirigió a los presentes para agradecerles el estar sentados en la mesa, algo que también hizo extensivo al intendente municipal Ricardo Moccero y a las demás autoridades que se sintieron convocados. “Nosotros creemos que estamos haciendo las cosas bien pero también sabemos que podemos cometer errores…”, comenzó diciendo Hippener quien no pudo obviar el hacer referencia a aquellos pioneros, que un día se afincaron en estos pueblos, formaron sus familias y mantuvieron sus costumbres y tradiciones. “Necesitamos del apoyo total, para mantener nuestra tradición, nuestra cultura…”, fue su exhortación a seguido y no faltó el agradecimiento para todos quienes lo acompañaron en la cocina, que bien ganado lo tienen. Seguidamente hizo una invitación a los presentes a acompañar los eventos a realizarse al día siguiente, es decir: el domingo de ayer.
La presencia de Moccero
Como dijimos en párrafos precedentes, en la cena se encontraban presentes además del intendente municipal quien estuvo acompañado de su esposa, el presidente del Concejo Deliberante, el delegado municipal y varios de sus funcionarios.
Al hacer uso de la palabra, el intendente Moccero expresó: “Siento una satisfacción muy grande de compartir estas fiestas tradicionales de las colonias alemanas…”, un poco más adelante anunció la inauguración del tramo de asfalto que sería el comienzo del camino asfaltado que está previsto llegue hasta el Balneario.
Hizo un breve racconto de algunas de las obras que se vienen realizando en las tres colonias no pudiendo obviar remitirse a cuando su padre (Domingo Moccero) fuera intendente poniendo en su boca las palabras que dijera en aquella circunstancia cuando, refiriéndose a estos pueblos, habría manifestado “… tenemos que saldar una deuda histórica con los pueblos alemanes”, recordando la llegada del gas natural el asfalto y un sinnúmero de obras.
En tono coloquial se refirió a que alguien habría dicho que él era descendiente de los alemanes del Volga, pero que no era así, reconociendo la gran influencia de esta etnia en la particular cultura y fisonomía de Coronel Suárez al manifestar que más del 55% eran de descendencia de los alemanes venidos del Volga.
Como era de esperar no desperdició la oportunidad para hacer referencia a se encolumnamiento con la presidente Cristina Fernández de Kirchner prometiendo que al terminar su mandato (en el 20l5) esperaba terminar con todas las obras…
La fiesta continuó con la animación del Grupo Astral y el espectáculo muy lucido que ofreció la gente que vino de Colonia Barón (Immer Truff), que arrancó calurosos aplausos de los concurrentes lo que se interpretó como un signo evidente de aprobación.
La fiesta fue un éxito y respondió a los deseos expresados por el intendente al terminar su alocución: “Felices Kerb y que lo disfruten”.
Fue la reflexión del intendente Ricardo Moccero, al evocar el cambio que hubo en los pueblos alemanes a partir de su administración y dijo que “hoy quieren venir a vivir a San José porque tienen todo… tienen servicios y calidad de vida”. Reconocieron la trayectoria de tres personas sencillas y humildes de la comunidad.
La jornada de ayer domingo, en ocasión de las fiestas patronales de la segunda colonia alemana del Volga, comenzó con un misa en la Parroquia ‘San José Obrero’, oficiada por el padre Mario Schmidt, para continuar con un acto oficial que se realizó en el salón parroquial, con muy poca asistencia de vecinos y sólo ocupadas las sillas por funcionarios municipales y allegados a la administración de Ricardo Moccero.
Con la Banda Municipal ‘Bartolomé Meier’ ubicada sobre el escenario y después de escucharse los himnos nacional y alemán, comenzó la parte protocolar, siendo invitado a dejar su mensaje el convecino Roberto Schell, en su calidad de haber sido uno de los primeros egresados del jardín de infantes del Parroquial ‘San José’.
Schell manifestó que “estas Kerb tiene como agregado un aniversario muy importante, como lo es para la comunidad educativa de la Escuela Parroquial el cincuentenario de su jardín, ya que el 5 de junio de 1963 fue fundado por parte de la Hermana Joela, siendo yo integrante del primer grupo de chicos que pasaron por esa institución, junto con mi hermana Carmen”.
Al apuntar su reflexión a la fiesta patronal, Roberto Schell dijo que “como ciudadano de Pueblo San José estoy muy agradecido de vivir en una colonia como esta, de gente sencilla, humilde, trabajadora, emprendedora, en una comunidad que con el transcurso de los años ha cambiado mucho… para bien, con la implementación de nuevos servicios, como agua corriente, cordón cuneta, asfalto y viviendas, aunque nos faltan las cloacas, pero todo eso hace a la calidad de vida de la gente”.
Para cerrar, sentenció que “la colonia progresa y ha crecido, tal es así que mucha gente la mira con muy buenos ojos, como un lugar para vivir… ya que es tranquilo, agradable, con gente buena, que uno puede andar con los chicos tranquilos, puede dejarlos jugar en la calle, que en otros lugares ya no pasa esto y es por eso que hay demanda de personas que quieren radicarse en San José, pero ya casi no hay casas en venta, ni terrenos; por suerte se construyen barrios, lo cual ayuda a que nuestros hijos, en esta época que vivimos, no tengan la necesidad de emigrar del pueblo en el que nacieron sino vivir y criar sus hijos en el lugar donde nacieron sus padres y abuelos. Esto es muy importante en la actualidad”.
Por último, sostuvo que “en el día de hoy, que es un día de fiesta… de kerb, es un día que invita a reunirse con la familia y amigos, viene gente de otros lado y es el momento de mostrar todo lo bueno que tenemos. Aportamos mucho al crecimiento de Suárez y seguiremos haciéndolo, pero también somos agradecidos y la calidad de vida que hoy gozamos se la debemos al intendente, que en sus años de gestión ha puesto sus ojos en los pueblos alemanes y es por ello han cambiado para bien”.
Las distinciones
Como todos los años, desde la Delegación Municipal se organizó un espacio especial para destacar a personalidades que a lo largo de su vida le han dedicado la misma a las instituciones y a la comunidad, siendo la primera convocada la señora Ana Wagner, quien nació el 25 de abril de 1923, cuenta con noventa años… tiene tres hijas, Etelvina, Vilda y Carmen, once nietos, 23 bisnietos y un tataranieto. Además de haber criado a sus hijas y atendido su hogar, se dedicó durante muchos años a la costura de colchones y frazadas, productos muy conocidos en la comunidad y hasta en la ciudad de Buenos Aires por su calidad. Una mujer sencilla, hogareña y trabajadora.
En segundo lugar se convocó a Anastasia Gellinger, vecina que nació el 9 de octubre de 1925, en la actualidad con 88 años disfruta de sus cinco hijos, 13 nietos, 19 bisnietos y dos tataranietos. A lo largo de su vida se dedicó a cuidar a sus hijos y se destacó cocinando muy bien, colaboró con el trabajo en la Iglesia y la escuela a través de distintas actividades.
Por último, se distinguió el aporte de don José Kaul, vecino que nació el 19 de abril de 1924, este año cumplió sus 89 años, tiene cuatro hijos, nueve nietos y quince bisnietos; durante cincuenta años trabajó de carnicero en San José, también participó durante un tiempo en las actividades de Club Independiente.
Después se entrega una distinción muy especial, a una institución que desarrolla su actividad en los tres pueblos alemanes, fue al Rotary Club que está cumpliendo 30 años de actividad ininterrumpida, por lo cual se le entregó una plaqueta a la presidente, Karina Steimbach, quien estuvo acompañada por Omar Rodondi, en su calidad de socio fundador.
Por otra parte, la comuna recordó que este año se conmemora que hace 250 años era escrito por Catalina II el manifiesto que permitió a los alemanes emigrar hacia las estepas rusas y por ello hizo entrega de una plaqueta que luego será colocada en un lugar de referencia de la localidad, recibiéndola Néstor Duckwen, quien además entregó calcomanías que hicieron referencia a este acontecimiento histórico.
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