Nuestros abuelos tenían por costumbre aplicar ‘Sprichworter’ (refranes o aforismos o dichos o proverbios) a cada acto de su vida. Y como regían su existencia sobre esos ‘Sprichworter’no podía ser de otra manera que tuvieran uno de diagnóstico de la personalidad de cada cual. El cual revela las actitudes y las aptitudes y proporciona una clave sobre los rasgos de la naturaleza de cada uno. Se podía y se puede descubrir si el ser humano es práctico, o es alocado o sustenta un hondo sentido moral...
La prueba consiste de cuarenta ‘Sprichworter’. No puede esperarse que la versión tenga la precisión de un experimento psicológico, pero es interesante y dará sin duda a animados debates.
Lea cada uno de los diez ‘Sprichworter’ y marque la interpretación que le parezca más lógica. Tenga presente que esta no es una prueba en la cual usted forzosamente acierta o se equivoca; sólo tiene el fin de revelar lo que cada ‘Sprichworter’ (Refrán) significan para usted.
1) Por su fruto se conoce el árbol...
a. Sólo a un tonto se le ocurre pedir peras al olmo.
b. De tal palo, tal astilla.
c. El hombre se da a conocer por sus acciones.
d. El mal nunca puede ser disimulado.
2) Nunca temas al día que no has visto llegar...
w. No quememos nuestras naves antes de tiempo.
x. Dios ayuda a quien tiene fe en el porvenir.
y. Desempeñemos bien la diaria tarea y no nos preocupemos por la de mañana.
z. No nos inquietemos por problemas que aún no se presentan.
3) Gran tormenta mucho espanta pero pronto pasa...
a. Las peores tempestades no duran mucho.
b. Tras la tempestad viene la calma.
c. Los problemas más difíciles suelen resolverse antes que los simples.
d. Cuanto más trabajemos, más blanda nos parecerá la cama.
4) El pensamiento postrero es más sabio que el primero...
w. La segunda idea es mejor que la primera.
x. Sólo el Señor ama al equivocado, pero aun Él lo encuentra difícil.
y. Repasemos nuestra labor para enmendar sus errores.
z. El mejor plan es el meditado concienzudamente.
5) A pillo, pillo y medio...
a. Pájaros de la misma pluma bien se entienden.
b. El fin justifica los medios.
c. Un problema determinado lo resuelve mejor quien tiene conocimientos especiales sobre él.
d. En el pecado se lleva la penitencia.
6) La hermosura poco dura...
w. Todas las mujeres son iguales por dentro.
x. Una mujer puede pintarse la cara, pero no el alma.
y. No es oro todo lo que reluce.
z. El carácter vale más que las apariencias.
7) Lo poco agrada, lo mucho enfada...
a. No llenemos la copa de modo que se derrame.
b. El glotón come hasta reventar.
c. Hasta lo bueno deja de serlo, llevado al extremo.
d. Riquezas y ruina empiezan con la misma letra.
8) La cuerda se rompe por lo más delgado...
w. Hombre precavido vale por dos.
x. El hombre no es perfecto si tiene un solo defecto.
y. Un solo descuido puede estropear toda la tarea.
z. La debilidad de carácter se manifiesta en los momentos difíciles.
9) No da paso seguro quien corre por el muro...
a. No es valentía la temeridad.
b. El que mucho abarca poco aprieta.
c. Toda empresa dudosa suele ser arriesgada.
d. Un momento de imprudencia puede llegar a lamentarse toda la vida.
10) Muda de cielo y mudarás de pelo...
w. La fruta del cercado ajeno es la más tentadora.
x. La caridad empieza por casa, pero generalmente nunca termina allí.
y. No se puede comer dos veces el mismo pan.
z. El cambiar de ambiente estimula la actividad.
Claves de la prueba de los ‘Sprichworter’...
Las interpretaciones más lógicas de estos ‘Sprichworter’ son las señaladas con las letras “c” y “z”.
Siete aciertos en los diez ejemplos indican normalidad de percepción y de capacidad para interpretar sutilezas de lenguaje y de pensamiento.
Ocho aciertos denotan comprensión superior a la corriente.
Nueve aciertos representan un excepcional dominio de las ideas.
¿Acierto en los diez? ¡El lector es un filósofo!
Dilucidaciones...
1) Las contestaciones “a” “e” “y” atraerán más a la persona de mentalidad práctica. Si hemos marcado una de ellas ha sido porque tenemos algún rasgo positivista en nuestro carácter. Dos interpretaciones de esta clase reflejan una actitud decididamente es la visión materialista de las cosas. Más de tres sugieren que se lleva el sentido práctico a extremos que queden impedirnos gozar plenamente de la vida.
2) Las interpretaciones “b” y “w” son señales de frivolidad y ligereza. Son las que escogería la persona que no pueda o no quiera concentrar su atención y cuyo pensamiento salte de una a otra idea. Una contestación de esta clase no significa mucho, pero quien elija dos de ellas revela cierta volubilidad. Tres ya descubren más claramente al alocado. Quien se incline por cuatro o más, haría muy bien en pensar seriamente en someterse a rígida disciplina mental.
3) Las “d” y “x” revelan a la persona obsesionada por los conceptos del bien y el mal, que se inclina a juzgar al prójimo según sus propios y estrictos principios morales. En la presente prueba tal persona puede sentirse fácilmente atraída a una errónea interpretación sólo porque esta refleje un sentimiento noble.
4) El que prefiere una “d” o una “x” probablemente tiene vetas de sana moral en su carácter. Si elige dos quizá sea algo más recto de lo necesario. Tres pueden ser señal de que debe ser más tolerante si no quiere fastidiar a sus amistades. Cuatro o más indican que tal vez necesite ayuda de tipo espiritual, pues hasta la rectitud y la probidad pueden resultar exageradas y perjudiciales.
Si esto le sirvió para conocerse más a si mismo o conocer a alguien de su familia o amistad, nos parece bárbaro. Sino tamícelo y listo. Hasta la próxima.
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